Thomas Lojek
Rich Graham:
La capacidad del tirador para pensar de manera crítica bajo estrés
Rich es un veterano del SEAL Team 10, donde se desempeñó como operador y francotirador.
Desde 2008, ha entrenado a miles de civiles, policías y operadores militares en todo el mundo.
Rich también asesora a diversas corporaciones y entidades gubernamentales en asuntos de seguridad y desarrollo de equipos.
Además, Rich ha participado activamente en numerosas organizaciones benéficas, incluidas: The Navy SEAL Foundation, Naval Special Warfare Family Foundation, Naval Special Warfare Kids, National UTD/SEAL Museum, Trident House Charity, Special Operations Warrior Foundation y Operation Restored Warrior.
También es el presidente de Home Front K9 Project. Home Front K9 Project entrena y dona perros de servicio a familias de Fuerzas Especiales en servicio activo y a veteranos con discapacidades.
Patrocinadores Oficiales
La capacidad del tirador para pensar de manera crítica bajo estrés
Cuando trabajo con tiradores, me concentro en dos aspectos principales:
1. Desarrollar la capacidad del individuo para moverse de manera eficaz detrás del arma, y
2. Potenciar la capacidad del tirador para pensar de forma crítica bajo estrés.
Al centrarse en estos dos elementos específicos, las personas se convierten en tiradores, pensadores y operadores más completos detrás de sus armas.
En lugar de limitarse a apretar el gatillo y acertar más a menudo, mis estudiantes saben dónde y cómo moverse, y por qué deben hacerlo en distintos momentos dentro de diferentes escenarios.
El mundo del tiro suele centrarse en los fundamentos del disparo: el aspecto propiamente dicho de accionar el arma.
Con esta mentalidad, hemos formado a muchos tiradores extremadamente rápidos en realizar cambios de cargador mientras se enfrentan a múltiples objetivos.
Ese tipo de habilidades es útil, pero un área que considero personalmente insuficiente es la capacidad del individuo para pensar de manera crítica bajo estrés.
La desventaja de esto es que contamos con muchos tiradores muy rápidos y precisos que carecen de la capacidad de procesar información con la misma velocidad con la que son capaces de entregar proyectiles al objetivo.
Decisiones para comprometer un objetivo de la mejor manera
Pueden surgir problemas significativos si se fomenta una cultura de tiradores que no pueden pensar ni reaccionar mientras están disparando.
Por ello, uno de nuestros principales objetivos en FSW ha sido establecer una variedad de escenarios y ejercicios dentro de nuestros programas de entrenamiento para desarrollar el pensamiento cognitivo bajo estrés.
Al crear obstáculos mentales, el individuo se ve obligado a reducir su ritmo a una velocidad menor de la que está acostumbrado a disparar, pero más adecuada a su capacidad para procesar la información que recibe.
De este modo, los tiradores reciben, analizan y procesan los datos para realizar evaluaciones o tomar decisiones específicas con el fin de comprometer un objetivo de la mejor manera posible.
Esto adquiere una importancia significativa en una situación de tirador activo, donde quienes responden deben procesar la información rápidamente y actuar con eficacia, en lugar de simplemente irrumpir disparando sin control.
Aquí en Estados Unidos, en situaciones de tirador activo, hemos observado un aumento de ciudadanos armados que intentan ayudar o trabajar junto a los agentes de la ley.
La mayoría de estos entornos son áreas con alta densidad de población y numerosos elementos en movimiento.
La capacidad de pensar de manera crítica bajo estrés
He trabajado con agencias de aplicación de la ley y con ciudadanos privados en todo el país para desarrollar dos enfoques primarios de entrenamiento: la capacidad de pensar de forma crítica bajo estrés y la capacidad de mover el cuerpo detrás del arma de fuego.
La capacidad de evaluar la situación y tomar buenas decisiones antes de comprometer un objetivo es fundamental para evitar que alguien actúe de forma precipitada y después se dé cuenta: “Maldita sea, disparé al objetivo equivocado”.
La capacidad de mover el cuerpo detrás del arma permite a quienes responden a una situación desplazarse dentro y alrededor de multitudes, a través de edificios o escombros, o encontrar una mejor cobertura respecto al objetivo mientras se posicionan para neutralizarlo.
En mis clases, una vez que hemos desarrollado una base sobre la cual los estudiantes pueden trabajar, pasamos a desarrollar su capacidad de moverse mejor y más rápido.
El arma de fuego solo es tan buena como la persona que está detrás de ella
Esto me lleva a un dicho que tenemos aquí en Estados Unidos.
Hay un chiste sobre el control de armas que dice: “Dejé mi arma en el porche durante una semana y no le disparó a nadie. Las armas no matan a la gente; la gente mata a la gente con armas”.
Hay verdad en eso, pero también es cierto que un arma de fuego solo es tan buena como la persona que la maneja.
La espada de un samurái es afilada y puede cortar, pero la diferencia es que la espada del samurái solo es tan efectiva como la persona que la empuña.
Requiere destreza, no únicamente un conocimiento básico de apuntar un arma y apretar el gatillo.
El samurái es un guerrero, y su éxito proviene de su condición física, movilidad, habilidades técnicas y capacidad de pensar de manera crítica bajo estrés.
Mi objetivo es formar guerreros con un movimiento sólido y pensamiento crítico, capaces de percibir y reaccionar ante una variedad de situaciones.
En Full Spectrum Warrior, entrenamos el cuerpo y la mente para que sean tan efectivos —o incluso más— que las armas que utilizamos.
